Tienda de Undertaker

Hogar y santuario de trabajo del sepulturero

"Hehehe, esto quedaran deliciosos~~"

En un dia de soleado en ondre, Undertaker aburrido por la ausencia de 'clientes', decidio aser yogur congelado de fresa, con formas de corazon realisticos.

"hehehe, perfectos, frios como los corazones de los que residen en esta ciudad sin risas"

Los mete al congelador (si...tiene un congelador, que tomo prestado de la dimension de Shinigamis), y mientras que espera a que esten hechos, se pone a limpiar un poco la tienda y ataudes.

Había caminado por los callejones de toda la ciudad, hecho su trabajo y ahora.. ¡seguía aburrido!

Si regresaba al mundo de los shinigamis, William lo iba a poner a hacer papeleo o seguramente a limpiar las oficinas. Cuando se enojaba con él, Will podía ser peor que un demonio y dar más miedo que el mismo Sebastian enojado. Fue entonces, mientras caminaba, que vio la tienda del Undertaker y decidió darle una visita. Platicar con él era seguramente más entretenido que regresar a sus lares.

-¡Buenas noches! -Dijo, abriendo las puertas dramáticamente y entrando sin ser invitado, como ya era su costumbre en ese lugar.

"He, Saludos Miss Sutcliff, que trae a una dama de su clase a una tienda que no se compara a su esplandor hmm?"

Undertaker pone la escoba que usaba para limpiar aun lado y le da su atencion a su visita y le da una d sus sonrisas unicas.

"Si es compania y un escondite de tu supervisor que busca, requiero una risa primero, y espero sea buena; ya que estoy haciendo un postre y m agradaria la compania hehehe viva"

Por eso y varios detalles más le encantaba visitarle. Undertaker era el único que le decía "señorita" sin importarle los gestos de todos los demás que habían llegado a acompañarle. Pasó con toda la naturalidad del mundo y se acercó hacia él, apoyándose en su hombro para saltar hacia su oído y decirle de manera coqueta y desvergonzada:

-Ne, ¿Cómo es que siempre sabes todo lo que quiero? -Sonrió a su vez, cómplice, para volver a acomodarse un paso lejos del peliplateado, comenzando a pensar, poniendo su dedo índice de forma pensativa en su boca -Ne... ¿Qué tipo de chiste requieres hoy? Algo picante, escandaloso, inocente, de profesiones o simplemente quieres que hable hasta que uno te guste?

Dijo, sentándose en uno de los finos ataúdes de la tienda.

Si... Era de los pocos lugares en los que encontraba la paz.

Hehehe, a pero que entretenimiento tan escandaloso siempre trae el shinigami rojo en sus visitas. Aun que le pida un chiste solo con su actitud ya lo hace sonreir.

"con esas palabras, como podria yo exigirle mas? pongase komoda mientras voi por los postres congelados, espero que el sabor fresa sea de su gusto"

Con eso se va a por los yogur en forma de corazones, y al regresar le ofrece uno.

"Aqui estan, viendolos bien me dan emocion por que tenga un cliente pronto y poder ver y comparar sus corazones con este, y ver cual es mas frio, pero seguro estos son mas dulces hehehe"

Esto si es buena compania, ahora ver la reaccion de Miss Grell, que aun con su amor a la sangre, todavia le daba asquerocidad unas cosas.....que divertido.

Definitivamente: Ese era el mejor lugar donde algún día pudo pensar esconderse.

A pesar de su apariencia exterior, Undertaker era todo un caballero. Si tan solo accediera a retirar ese flequillo de sus ojos y a lucir esas gemas junto con sus lentes. La sola idea hizo que Grell se sonrojara mientras escuchaba la voz un tanto pastosa del sepulturero.

-La fresa me gusta -dijo Grell, sonriendo -Es roja. Todo lo bueno debe ser rojo. -Coqueteó, señalándose a él mismo y sonriendo coqueto mientras veía a Undertaker ir y venir en su tienda.

Tomó uno de los helados y comenzó a comerlo con una cucharilla, elegantemente, incluso lamiendo la cuchara más de lo normal mientras sus ojos se quedaban fijos en Undertaker y... Fue cuando lo dijo.

-¿PORQUE? -le alzó la voz, dejando el yoghurt a un lado y parándose rápidamente, hasta llegar junto a él y subir los brazos a su cuello, comenzando a asfixiarle -¿Porqué tienes que arruinarlo? ¿Porqué no puedes simplemente dejarlo en un cumplido a esta inocente e indefensa señorita y ya?

Reclamaba Grell mientras le mostraba sus dientes, agresivo.

Con voz rasposa por la restrinccion a su garganta contesta "Hehehe, oya~...y cual seria...la-la diversion en eso? Mis...disculpas se la molesto heheh"

Ya no pudo terminar su oracion por la salica ke le escurria, por dentro el retirado shinigami estada disfrutando inmensamente del acto tan predecible y adorable del otro.
Le agarra las muniecas (mi teclado es americano), para detenerlo y lo aleja de su garganta.

"heheh tan lindo que sea tener esas manos sobre mi, creo que me gustaria mas que terminemos nuestra merinda ne?" va por el postre abandonado y con la cuchara ofrece alimentarlo con ella.

"ehehe o prefiere que se lo sirva de otra manera?" Con eso se come el mismo la cucharada, pero sin que se la haya tragado. De verdad, es entretenimiento de primera clase con ella.

Grell sabía que Undertaker tenía una fuerza que sobrepasaba por mucho lo que todos los demás creían de él. Lejos de ser un anciano decrépito y loco, Undertaker tenía un físico excelente, musculoso y una fuerza de un joven. Sus manos fueron retiradas de forma casi inmediata y eso hizo sonreír coqueto al shinigami pelirrojo.

Grell era conocido en la división por ser alguien agresivo, con mucha fuerza física, tanta, que a veces lo comparaban con la fuerza de los demonios contra los cuales luchaban durante su trabajo y sin embargo, Undertaker le había hecho doblar sus manos como si su fuerza hubiera sido nula.

-Te perdonaré solamente porque me llamaste señorita -Le deja saber, acercándose y abriendo la boca, para comer de la cuchara que le ofrecía y sin embargo. -Eso es traición -Dijo, lamiéndose con cuidado sus labios y, a pesar de delinear sus peligrosos dientes, no hiriéndose con ello.

Observó como el sepulturero parecía esperar, esperarlo a él y Grell, que no podía dejar que uno de los hombres de su vida se quedara con mala impresión de él, se fue acercando poco a poco, con movimientos felinos, hasta quedar frente a frente con el platinado.

-Se hace como yo diga. -Susurró, alzando el flequillo del sepulturero y exponiendo su rostro para él. Sonrió, sonrojándose si tan solo un poco -Tan guapo -le dijo, con una media sonrisa y en un momento, sus labios se sellaron sobre los de Undertaker, saboreando el postre dulce en su boca.

Mmmm, fresa con sangre, en lo personal no le gustaba tanto la fresa, era el unico sabor que le quedaba en la lacena; pero agregardole el sabor metalico que tiene la sangre, mm esquisito. Una cortadita en la lengua no le importaba en lo mas minimo, y mas si ocasionaria que se apartara del pelirrojo.

Abro la boca mas para poder compartir mas de la nieve entre los dos, con el brazo qie tenia la cuchara, lo enredo desde atras para traerlo mas cercas. Despues de jugar con el postre hasta derretirse, se aparto con un ultimo beso leve. "Perdon, estaba bajo la nocion que en estas situaciones es el caballero que esta la mando"

Me pregunto cuanto mas puede aguantar su paciencia~, "Pero puedo ver que usted es una dama muy independiente, mmm creo que ya e ignorado mis queridos clientes demasiado" Con eso se aparto y dio la vuelta para uno de los ataudes, dando la espalda para que no viera su sonrisa.

El abrazo del shinigami retirado fue cálido.

Grell amaba que fueran dominantes con él, que su acompañante tomara el control y le dejara saber que tenía el poder para hacerle llegar al cielo o incluso, llegar a lastimarle. Había algo de sadismo escondido detrás de su porte de dama. Undertaker era peligroso y Grell estaba muy consciente de ello; aparentaba locura, pero tenía una apreciación de la realidad quizá mejor que cualquier otro.

"Jugar a ser loco para el mundo, averiguar lo que nadie más sabe, jugar con los pensamientos de los demás y tener en tu control asuntos en los que personas peligrosas estaban involucrados y NECESITARIAN de ti" Undertaker era demasiado inteligente. Locamente inteligente.

Grell se deshizo en el beso, imprimiéndole la pasión roja por la que todos le conocían. Se entregaba en cada cosa que hacía, porque era su visión de la vida, "vivirla al máximo, al momento, al rojo momento pasional" Rió un poco con el comentario de Undertaker, mirándolo con atención cuando le dijo que era una dama independiente.

¡CLARO QUE LO ERA! Ella y su chainsaw para siempre podían asustar hasta el hombre más valiente.

Abrió los ojos con sorpresa y se puso las manos a la cintura cuando Undertaker le ignoró olímpicamente.

-¿Así nadamás? -Dijo, con un tono casi dolido -Tan frío... Tan cruel... Mira que dejar a una dama luego de tomar su inocencia --Jugueteó con las palabras, actuando su papel de manera tan perfecta que cualquier espectador lloraría una lágrima.

"hehehehe a pero que buena actriz es usted, con esa pasion en los ojos, la voz seductora, de verdad una lastima para dejarla asi nomas, ne?" De verdad que esta bola de energia roja era demasiada! Como es que siempre la encutra sola, nunca lo sabra; con esa personalidad que atrae como fuego a una palomilla.

Me doy una vuelta, sonriza lista y siguo, "Pero con tantas cualidades en solo una persona, me hace pensar, en que incencia se refiere? Alguien como usted, ya le debio de haver dado ese honor a otro hehe, quisiera contarme como fue eso o...."

Con rapidez que no uso desde que soy un official activo, aparesco detras de Grell, con brazo lo agarro por en medio etrapando ambos brazos a los costados, con mi otra mano le tapo la vista (sin presion, para no lastimarla con los lentes) y me acerco a su oreja "....o mejor la reanimamos el acto de su inocencia robada?"

Sientiendo con satisfaccion que tiembla bajo sus toques, le muerede con poco la oreja como recompensa. No he perdido el toque despues de tanto con la muerte al parecer.

La respuesta de Undertaker le tomó completamente desprevenido.

Abrió la boca con sorpresa, para reclamarle, pero se sintió delicadamente atrapado por el shinigami legendario. Grell sonrió, dejándole hablar, si temblando en poco por el toque. Si Undertaker quería jugar, jugarían.

-Me ofendes -Dijo, con la voz fría como el hielo -Levantarle falsos a una dama es completamente despreciable -Le comentó, alzando una ceja, volteándose, retirándose de su agarre para empujarle lejos de su cuerpo, comenzando a caminar hacia atrás.

-¿Y sabes qué es peor? El querer tomar acción en tu ofensa -Dijo, relamiéndose los labios, levantando su dedo índice y diciéndole que no --Primero me dices que no soy inocente y luego quieres comprarme con un poco de Yoghurt?... Señor Undertaker, le va a costar más que eso.

Dijo, sonriente, para dejar su mirada bicolor fija en Undertaker.

"Que inicie el juego" Pensó el pelirrojo.

Al alejarse de el, lo empieza a encitar con llamadas de juegos y un desafio. Hehe, que bien, ya por lo menos se que no sera un juego rapido.

"Mas caro me costara, dice usted Milady? Hehe, pero claro~, el postre solo era de cortesia, que un caballero le deve de mostrar a una dama" Camino alrededor de un ataud y me recargo en el.

"Entonces menciona tu precio Miss Grell, que tanto quisiera de mi? Soy un Lord despues de todo, y como un tal Houshaku dice 'estoy a sus ordenes'" solo en esta situacion me encontraria repitiendo lo mismo que el pequenio amo Ciel, tch, con su forma de siempre complacer a gente sin valor; pero por eso esto era diferente, esta persona tenia MUCHO valor.

Suerte que mi cabello me tapa los ojos, porque si no, ella se daria cuenta que no habian dejado de ver esos labios que recien habia remojado con esa linda lenguita. 'mmm, sus labios se ven mas rojos ahora por el postre', penso el retirado Shinigami. Y tambien se preguntaba si hacia el mismo movimiento de caderas con otros seres.

-Ah... Empezamos entonces con la poca delicadeza de querer que yo misma nombre cantidad... Como una prostituta --La cara de Grell lejos de ser ofendida era de total diversión. Amaba la manera en la cual Undertaker le seguía los juegos y es más, se metía en su propia obra, actuando tal y como Grell esperaba. El quedarse tiempo extra con él y huir de su jefe valía mucho la pena.

--¿Has escuchado de la nueva moda de los nobles? --Le preguntó, mirándole seriamente --Se llaman escorts, son como prostitutas, pero muy finas. Los nobles mueren por salir con ellas, porque pasan por damas de alta sociedad y en muy raras, raras ocasiones acceden a tener relaciones íntimas con ellos. ¿Puedes creerlo? --Sonrió, caminando hacia él con ese hipnótico movimiento de caderas que tenía --Dime, Noble Undertaker ¿Quieres que sea tu escort esta noche?

La pregunta salió de sus labios como algo melódico, quedó justo al lado de él mirando su rostro, tratando de adivinar que expresión tendrían sus ojos, hermosos ojos que le habían atrapado desde aquella vez en l biblioteca de los shinigamis. No entendía aún porqué llevaba cubierto tan llamativo rostro. Esperó su respuesta, viendo qué tan lejos iba a llegar el sepulturero de Londres con su actuación.

ESCORT! Hehehe, pero que mente tan traviesa y divertida~~. No esperaba menos de ella.

"A~, oya~, he escuchado de eso, una manera mas honorable de ganarse la vida para jovencitas bellas, no cree? Y seria mi total honor que usted fuera mi escort por esta velada, que tal si la llevo algun lado a fuera o la seguira persiguiendo el tenible Caballero Spears" Mientras decia eso, le tome la mano para acercala a mis labios he inclinarme, como se deveria a una doncella.

"Es toda su desicion, si se quiere arriesgar una noche, al ser descubierta con un Hechizero desterrado hehehehe" De verdad que el no funcionaba como actor, pero esperaba que esto le seria suficiente; por que infeliz sera si no la complace despues de ver esas caderas (que estaba seguro ahora, que lo hacia adrede) que se movian sensualmente con el resto de su cuerpo flexible.

--El "temible caballero Spears" me seguirá persiguiendo hasta el fin del mundo si es necesario, pero simplemente es para que entregue mis reportes a tiempo y siga recolectando almas aburridas... Entonces, caballero galante, ¿Porqué no salimos usted y yo y me deleita con sus favores de noble? --Volvió Grell a la carga, tomando del brazo a Undertaker y señalando la puerta.

-Vayamos a algún restaurante, a comer algo y luego veremos adonde nos dirige el destino. --Coquetea, para comenzar a caminar jalando con él al sepulturero --Vamos vamos... Puedes atender a tus glamorosos clientes después, es más, si sales conmigo, prometo esmerarme en mis recolecciones e incluso dejarte clientes completamente manchados de rojo.

Ofreció, guiñándole un ojo y esperando que él guiara el camino.

Res-restaunrantes?! Eso no se esperaba. Habia tenido mas en mente una caminata por el centro de Londres, lugares como restaurantes siempre le hacian cuestionar la comida servida.

Al ser jalado por el pelirojo a la puerta, estaba teniendo segundas opiniones y--cuerpos nuevos? Oh, bueno eso cambia las cosas. Si es por eso, entonces si, ademas, si no se apresuraba con una respuesta hiba a terminar sonrojandoze con todos esos guinios coquetos tirados a su direccion.

"Ahem, entonces marchemos, y mostremoles a esta gente como se debe de pasar una noche en buena compania" Doy unos pasos para abrir la puerta y siento una rafaga; hehehe, exelente.

"venga Milady, con este clima, de seguro se llearan los mejores lugares pronto para mantenerse calientitos"

La dirijo hacia afuera enfrente de mi tienda, doi la vuelta para cerrar (nunca se sabe si hay un maniaco tan loco, como para robarle), Me volteo dandole una gran sonriza y enrosco un brazo por su cadera para atrerlo mas cercas. "Preferir mantenerse cercas Milady, no quiero que se resfrie y para ser honesto, no se ve muy calido ese abrigo rojo hehe"

Sin tomar en cuenta que, ni lo puede subir mas aya de sus codos.

Entonces había cedido.

Undertaker casi nunca salía de su tienda a menos que fuera hacia el cementerio o a recoger algun cuerpo imposible de reconocer. Fuera de eso, el conocido como Undertaker no se aventuraba lejos de su guarida.

-Entonces si usted guía mi paso, señor, yo le puedo mostrar adonde es un buen lugar para estar calientitos... -Susurró pegándose más a su cuerpo y al fin, saliendo del lugar.


*****Sigue en el Restaurante "Romeo y Julieta"****

**Seguimiento desde el tema "Parque Central de Londres"
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Le había trasladado con mucha rapidez y delicadeza hasta la puerta de su tienda, bajándole con cuidado hasta que sus zapatos de tacón tocaron el suelo. Grell se había apoyado sobre la espalda del Undertaker, su pecho recargándose completamente en él y sus labios juguetones pasando por el lóbulo de su oreja para si apenas besarlo mientras le decía:

-Hemos llegado a su casa, noble señor. Ahora... Me gustaría ver su dormitorio, para poder regresarle el favor de hacerme pasar una maravillosa noche -Dijo coquetamente, esperando a que le abriera la puerta.

Una vez dentro de la tienda, Grell comenzó por retirarse sus guantes, los cuales dejó en el escritorio del platinado. Volteó a verle mientras comenzaba a bajar de manera lenta y sensual su gabardina roja.

-Entonces... ¿Qué dice, mi noble señor? ¿Me invitará a dormir con usted? -Preguntó, retirando al fin una de las mangas del abrigo rojo, dejándolo que colgara libre, aún con el otro lado vestido.

Llegando a la tienda, deja bajar a Grell de sus brazos, para poder sacar la llave y abrir, pero al momento de sacarla, siente el cuerpo femenino de su aconpaniante recargandose en su espalda, jugando con su oreja y suspirando coqueteos en ella, tanto que hasta le cuesta trabajo al sepultero contenerse un poco.

Tan rapido como puede, pero manteniendo postura, abre la puerta y deja que Grell entre primero luego el, y cierra la puerta denuevo. Volteandose escucha la voz del peiirojo, como si estuviera mas lejana, ya que su atencion estaba mas enfocada en sus movimientos seductores mientras se quitaba sus guantes y media gabardina; en su mente ya podia ver sus propias manos quitandole lo que restaba de encima para reclamarla.

Acercandosele un poco "Usted esta mas que invitada m'dear~, esta es su casa, tanto como la mia" Con un movimiento rapido de su brazo, ya la tenia por la cintura presionando su cuerpo delicado (pero aun con firmesa de musculos), con el suyo, inclinandola un poco hacia atras como si fuera una danza.

"Esta noche no es usted la que debe de dar o preocuparse, le entrego toda mi atencion y afecto, esta velada este cadaver es suyo~ para hacer lo que quiera~" Para enfatizar mas lo ultimo, deciende a una parte del cuello del otro, tomando entre sus diente un pedazo de piel, succionando, lamiendo y demas, todo para sentir las chispas de placer que estaban pasando por la espina de su damisela.

Apenas escuchando la voz del otro de que siguieran esto en la cama, con un ultimo beso leve en la boca le agarra la mano y la dirige a su habitacion.

Su corazón era el que danzaba.

Grell estaba embebido en esa escena en la cual Undertaker era el que lo guiaba por la pista de baile. Estiró su cuello un poco más, dejándole probar su piel, estremeciéndose entre sus brazos.

-Tienes demasiada fuerza para ser un cadáver -Le dejó saber, sonriendo, mientras se incorporaba y le seguía a su habitación. Le encantaba la atención que le daba Undertaker, le hacía sentirse realmente una damisela a quien había que cuidar, delicada, en peligro. En resumen, le daba lo que necesitaba. Cuando el beso se posó en sus labios, quiso intensificar, sin embargo, fue cortado en su inspiración por la mano del sepulturero. --Muéstrame tu lugar de descanso, Undertaker...-Susurró, siguiéndolo hasta su habitación.



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**Sigue en la habitación. ***
Amo saltar los lugares, lol.